domingo, 3 de junio de 2012

Volver a escribir


Es raro, uno escribe pero como que antes de escribir y publicar, piensa mucho quién lo va leer, cómo lo va a recibir, cómo puede hacer que impacte de cierta forma.. 
Eso me da miedo, miedo porque a veces uno lo hace y si no lo hace tan seguido, tiene ganas de hacerlo.
Entonces, ¿qué onda? ¿Por qué hay que filtrar tanto? ¿Tan difícil es comunicarse? Quizás no tenga que ver con la comunicación, sino con factores externos o ajenos a los receptores-emisores. 
Esto me lleva a pensar: lo cómodo que es sentirse deseado, insatisfechamente uno está condicionado a lo que otro necesite de uno, tal vez no deseado, cambiémosle a sentir que lo necesitan. Ego. Aprobación. 
¿Y para qué? ¿Por qué? Porqué uno tiene que sentir que lo necesitan para sentirse importante, no para serlo, claramente, porque sentirse importante no es serlo. Para nada. Nos engañamos, nos encanta engañarnos y creernos nuestras mentiras, o las mentiras de otros.
¿Cuál es nuestro problema? ¿De quién fue que aprendimos tan mal? O justamente porque no hay de quién aprender es porque somos tan básicos. A mí me gustaría saber.
También podría decirse que los errores, -todos aquellos que marqué-, son para ser aprendidos e integrados a nuestro itinerario de conocimiento vivencial-empírico que no debemos de olvidar porque estaremos fritos.
Pero las sitauciones son distintas, -podría decir alguien- las personas, los contextos, los dichos, las accciones.. 
En ese momento uno tiene que optar: ser débil o ser decisivo


Ahora, pase lo que pase, deberás hacerte cargo. Nadie más podrá hacerlo si no lo hacés vos.

No hay comentarios: