viernes, 29 de mayo de 2009

Apegos


Tres ejemplos simplificados:

Amor
Una pareja adolescente que conoce su primer amor (llamémosle a él Cacho y a ella Yolanda). Cacho siente un gran amor por su amada y cree que no puede vivir sin ella. Evidentemente para Cacho supone una cierta tranquilidad el saber que “su” Yolanda estará siempre a su lado y es precisamente este enfoque de la vida lo que produce su infelicidad. Para Cacho, el Amor está establecido en Yolanda, tiene su forma, está totalmente representado por esa persona y el dolor lo recibirá desmesuradamente, en caso de perderla. Cacho tiene apego hacia Yolanda. Confunde la forma (es decir, Yolanda) con aquello que representa (el Amor). Si Yolanda deja a Cacho por otra persona Cacho creerá que ha perdido el Amor, cuando en realidad solo se desafectó de la persona.

Dinero
El hombre utiliza al dinero como forma de energía. No se caracteriza por la cantidad que posee, sino en cuanto éste le tiene atrapado a él. Piensa que el "no tener” le producirá infelicidad, provocando un apego a sus bienes, sin considerar que si perdiera todo lo que tiene seguirá siendo el mismo.

Envase Corporal
El Ser Humano aprecia su carne. Lo necesita porque cree que su existencia se limita a su cuerpo, pero es mucho más que eso. Al hombre Occidental le cuesta asimilar que es un Alma con más cosas y no un cuerpo con atributos. Esto no sucede en otras culturas, donde los términos se invierten dando más peso a la vertiente espiritual de cada uno (como sucede en la India por ejemplo, que consideran a la Muerte como un fenómeno natural). El hombre de Occidente teme a la Muerte. Dicho miedo significa apego al cuerpo, al mundo terrenal.
Ante lo expuesto se presenta un inconveniente que no reside en el deseo, sino en el apego que se crea por aquello que nuestros deseos nos otorgan. Siempre que en nuestra vida se presente el miedo a perder algo es signo de que hay un apego de por medio. Es muy difícil que eliminemos al 100% los apegos, pero si fuéramos capaces de hacerlo no habría nada ni nadie que nos pudiera causar daño. Ni la pérdida de trabajo, seres queridos o bienes serían capaces de afectarnos. Sería la perfección, la muerte del yo.

No hay comentarios: